Resistencia a la tracción de dos tipos de cemento de ionomero de vidrio utilizado en coronas inderectas en Odontopediatría

Abstract

La caries temprana de la infancia (CTI) es una enfermedad caracterizada por lesiones cariosas en menores de 72 meses de edad de carácter multifactorial que primero afecta a los incisivos superiores ya que son los primeros dientes en erupcionar, le siguen los primeros molares superiores e inferiores, caninos superiores e inferiores, segundos molares superiores e inferiores y los últimos en dañarse son los incisivos inferiores por la protección que les brinda la lengua.1 Al ser los incisivos superiores los más afectados por esta patología, existe un daño directo a la estética en la sonrisa del paciente infantil, por lo que se ha vuelto una de las principales preocupaciones de los padres al rehabilitar estos dientes. La prevalencia de la caries de la infancia temprana varía de 3.1% a 90% dependiendo de la vulnerabilidad de las poblaciones, sobre todo cuando éstas pertenecen a grupos de nivel socioeconómico bajo.2 La rehabilitación estética de los dientes anteriores primarios muy cariados es una tarea difícil ya que el clínico debe restaurar el diente estéticamente y también manejar el temperamento de un niño pequeño ya que debido a su corta edad aún no han desarrollado por completo sus habilidades cognitivas. La restauración para los dientes primarios anteriores debe ser duradera, estéticamente agradable, retentiva y fuerte, ya que se necesita que estén presentes en boca hasta aproximadamente los 8 años de edad del paciente cuando los dientes primarios comiencen a exfoliar.3 Los materiales de las coronas estéticas prefabricadas para restaurar los dientes anteriores temporales deben su durabilidad en boca al material de cementación que se utilice, ya que este tipo de coronas no puede ser ajustadas con las coronas de acero-cromo.