Resumen:
El presente trabajo terminal de grado se ha llevado a cabo motivado por el problema
latente de desaparición de mujeres adolescentes y el papel de la institución
encargada de atender este delito en el Estado de México.
En la Fiscalía Especializada para la Investigación y Persecución de Delitos en
Materia de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por
Particulares se llevan a cabo técnicas de atención a las personas usuarias que
solicitan apoyo para búsqueda y localización de algún familiar, las cuales se
desarrollan en un proceso que se compone de tres áreas: primero en la declaración
ante ministerio público, posteriormente en la entrevista con agentes de la policía de
investigación y finalmente en la toma de datos para la elaboración del boletín de
Odisea; sin embargo, las y los servidores públicos han legitimado un calificativo para
la mayoría de los reportes de desaparición de mujeres adolescentes, se le ha
nombrado como: “ausencias voluntarias”; es decir, asumen que las mujeres
adolescentes tienen la madurez equivalente a la de una persona adulta para la toma
de decisiones frente a una situación de vulnerabilidad que las puede hacer
desaparecer, además de ignorar si existe coacción o influencia de terceras personas
en el hecho. Este argumento es utilizado para justificar la dilación o, en ocasiones,
la omisión de diligencias de búsqueda ya que pueden afirmar que las adolescentes
están en compañía de alguna pareja sentimental o amistad que no las pone en
riesgo y que regresarán por sí mismas en poco tiempo. En este sentido, la institución
evade su obligación de buscarla dentro de las primeras 24 horas, al mismo tiempo
que culpabiliza a los familiares de cualquier hecho que les pueda ocurrir a las
víctimas durante la ausencia o desaparición, aunque este sea la comisión de un
delito.